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La Pampa es una provincia casi plana con pocos accidentes geográficos de
altura. Muchos creen que su máxima elevación se encuentra en uno de los
cerritos de la Sierra de Lihué Calel, (595nsnm) perteneciente al Parque
Nacional del mismo nombre, sobre la RN 152. Pero no es así. Hacia el Oeste, el
territorio alcanza a recostarse sobre las primeras estribaciones de la meseta
de la Payunia, y en el rincón NW, en una planicie que está a poco más de 1000
metros sobre el nivel del mar emerge un pico que alcanza los 1188m. Es el
Cerro Negro que se eleva apenas unos 150 metros por encima de su entorno. Su
cima es la máxima altura de la provincia.
Con unos amigos con los que compartimos el gusto por las montañas, y con
quienes frecuentemente viajamos a Mendoza o Neuquén para hacer algún ascenso,
y mientras viajábamos al Tromen en marzo de este año, nos propusimos: “Tenemos
que subir el cerro más alto de la Pampa”. Si no lo hacemos nosotros no lo va
a hacer nadie. Desde el punto de vista del andinismo no tiene ningún interés
hacer 500km para subir un cerrito de 150m en el medio del desierto. Pero
nosotros tenemos otra motivación: “Es el nuestro”. Además esa fue la excusa
para recorrer el oeste de nuestra provincia. Particularmente en mi caso, hace
25 años que vivo en Santa Rosa y nunca fui hasta allá. Otros nacidos acá,
tampoco.
Describo a continuación algunos de los lugares que muestran las fotos:
Algarrobo del Águila. Es un pueblito de unos 300 habitantes. Cabecera, y
única población, del departamento Chical-Có. El Arroyo de la Barda es uno de
los brazos del río Atuel, y el único que todavía trae un poco de agua.
La Humada es un pequeño caserío de menos de 200 hab. Hay una escuela
albergue donde los chicos de los puestos de los campos de la zona de hasta 80
o 100 km viven de lunes a viernes (Y en algunos casos de marzo a noviembre).
Agua de Torres es un manantial en medio del desierto. No hay población allí,
sólo un puesto. Hay una zona preparada para cultivar con riego del manantial,
con barreras protectoras de álamos, pero no está trabajado actualmente, y el
agua del manantial se entuba para abastecer a La Humada. Fuera de donde llega
el riego, el paisaje es sumamente árido. Sólo crecen cactus, chilladoras
jarillas y alpatacos muy achaparrados. En el suelo hay muchas rocas basálticas
originadas en erupciones de los volcanes de la Payunia.
Agua Escondida. Apenas se cruza el límite con la provincia de Mendoza está
el caserío de Agua Escondida, que tiene unos 150 habitantes, y donde también
hay una escuela hogar. Hay un arroyito que se embalsa para proveer de agua a
los pobladores. En toda esta zona sólo hay muy pequeños grupos poblados allí
donde hay algo de agua. A la orilla del arroyo hay un lugar para acampar donde
pasamos la noche.
Puesto Cerro Negro. El “puesto” es el lugar donde viven los dueños (o los
encargados) del campo. En esa zona hay un puesto cada más o menos 10.000
hectáreas. Aunque parezca mucho, esa superficie les sirve para criar unas cien
vacas y algunos chivos para consumo. Toda la zona es muy árida (Las lluvias
andan en unos 150-200mm al año) por eso la vegetación es muy escasa, pero
tienen agua de pozo que sacan con molino a viento. En algunos puestos más
modernizados tienen un equipo de bombeo que funciona con un panel solar. La
gente que vive en el puesto está muy aislada. El puesto más cercano está a
unos diez kilómetros de huellas de arena, y una población con algunos
servicios, como Santa Isabel, de unos 1500 habitantes, a más de 150km. Cuando
llegamos al Puesto Cerro Negro, a pedir permiso para ir al cerrito, nos
encontramos que había ahí tres mujeres solas. El hombre se había ido a San
Rafael para ver al médico. De las tres mujeres, una chica de unos quince años,
una mujer
de 46 y una abuela de ¡¡96!!, Doña Paulina,
que nos decía orgullosa que había nacido el 26 de enero del 1910, y que toda
su vida había vivido en el puesto. Demás está decir que nos atendieron con
gran amabilidad. Seguramente ven gente muy de vez en cuando. Al volver del
cerro paramos de nuevo en el puesto y les dejamos las frutas que teníamos, ya
que seguramente no ven nunca una fruta fresca, y la señora nos estaba
esperando con unas tortas fritas que hizo para nosotros !!.
Cerro Negro: Bueno, este es el cerrito. Hacia Mendoza, se ve imponente el
cerro Nevado, y al oeste varios cerros más, todos más altos que el nuestro.
Hacia el este una extensísima llanura. Tiempo de subida: 25 minutos.
Laguna Amarga. No confundir con La Amarga que está al sur de Lihué Calel.
Ésta está cerca del límite con Mendoza, y es mucho más chica. Las barrancas de
esta laguna pertenecen a la formación rocanense, del límite
cretácico-terciario (65 millones de años) y contiene restos fósiles de la
última incursión marina que llegó hasta allí desde el Atlántico.
Posteriormente hubo otras incursiones del Atlántico en territorio pampeano,
la última en el Mioceno, pero no llegaron tan lejos.
Las fotos que les muestro están sacadas algunas con una cámara digital
compacta Sony que me prestaron durante el viaje y otras con mi Canon “a
rollo”, con Kodak Pro-Image 100, y escaneadas desde el papel. No pretenden
buscar una expresión artística, sino simplemente testimoniar en imágenes una
región muy poco conocida, incluso para los que vivimos más o menos cerca. Las
fotos donde aparecen personas del lugar fueron tomadas con permiso de quienes
aparecen en ellas, y quedamos en enviarles copias.
Ver Fotos
Espero que les gusten.
Un fuerte abrazo.
clan@andinautas.com.ar |